Origen y evolución de la novela hasta el siglo XVIII
Categoría (El libro y la lectura, General) por Manu de Ordoñana, Ana Merino y Ane Mayoz el 26-09-2015
Tags : genero-literario-tardio, novela-morisca, novela-polifonica, primera-novela-gay, primera-novela-moderna, primeras-ficciones-en-prosa, prosa-ficcional
Las novelas, esos libros que tanto nos han hecho vibrar a lo largo de nuestra vida, han tenido un largo devenir. Se le considera el más tardío de todos los géneros literarios, puesto que no logró implantarse hasta la Edad Media.
En cuanto a su etimología, proviene de la palabra italiana novella (relato de ficción intermedio entre el cuento y el romanzo o narración extensa); ésta, a su vez, de la forma femenina latina novellus, cuyo significado sería “novedoso”. El término novela, que en tiempos de Cervantes mantuvo su acepción original de “relato breve”, posteriormente servirá para designar la narración extensa (en francés, roman), mientras que el relato breve será denominado novela corta.
El origen de lo que luego denominaremos novela lo encontramos entre los siglos II a.C. y III d.C. en Grecia y Roma, aunque existen, con anterioridad, largos relatos narrativos en verso propios de tradiciones orales como la sumeria y la hindú. Las primeras manifestaciones de muchos de los géneros literarios que más tarde aparecerían en Occidente se dieron en la literatura oriental, en especial, en lengua sánscrita.
El primer texto indio que cabe considerar como precursor de la novela es, quizá, Cuentos de diez príncipes, un romance en prosa de Dandin, escritor en sánscrito de finales del siglo VI d.C. La primera novela psicológica más antigua de la literatura universal y la más importante de la literatura japonesa clásica es el relato Genji Monogatari (siglo XI), de la escritora Murasaki Shikibu.
En Grecia con Homero y en Roma con Virgilio ─autor de la Eneida─ se puede hablar de las primeras ficciones en prosa; la ficción, uno de los ingredientes de la fórmula mágica de la literariedad, ese elemento indispensable que convierte un texto en literatura.
En la época del imperio romano aparecen las inaugurales manifestaciones escritas en latín y dignas de tal nombre son el Satiricón, la primera novela gay de la historia, atribuida a Petronio (siglo I d.C.) y el Asno de oro de Apuleyo (siglo II d.C.), considerada como una de las joyas de la literatura universal.
Pero es en Grecia donde encontramos las primeras narraciones de verdaderas aventuras épicas, como las creadas por Homero (la Iliada y la Odisea) y que dan origen al género. Después de esto, la épica ha evolucionado en dos direcciones. Primero de una forma estructural, puesto que de ser un género narrativo escrito en verso pasó a ser un género escrito en prosa, la novela. Segundo, en cuanto al contenido, ya que deja de centrarse en los mitos y valores del mundo antiguo (el valor, la virtud, el heroísmo) para ser reemplazado por el mundo novelesco, cargado de otros valores (libertad, individualidad, subjetividad).
En definitiva, la unión de la épica y la novela se manifiesta en la representación de un mundo repleto de elementos (ideas, personajes, valores, tipos de mundo, etc.), con una perspectiva temporal que favorece la narración en pasado y cuyo contenido se alimenta de los recuerdos contados y transmitidos por la tradición sobre los héroes legendarios y sus proezas.
Ya desde los griegos nos viene la clasificación de la novela en cuatro tipos básicos: novelas de viajes (Vida y Hazañas de Alejandro de Macedonia de Pseudo-Calístenes), amorosas (Dafnis y Cloe de Longo), satíricas (Satiricón de Petronio o El Asno de oro de Apuleyo) y bizantinas (Historia de Apolonio rey de Tiro).
Llegamos pues a la Edad Media donde podemos encontrar, junto a relatos de novela corta, nuevos modelos de narración extensa, como la novela sentimental y la caballeresca. Esta última surgió con afán de aventuras y como alternativa fantasiosa para aquellos que no podían recorrer la geografía descubriendo aventuras. Los libros de caballerías son las primeras obras puramente novelescas, escritas en prosa y ficcionales.
La narrativa medieval fue poesía épica cantada por los juglares. A partir del siglo XIII se fue creando en Europa la narrativa en prosa. Quizás las tres primeras obras que se pueden llamar novelas aparecieron en España: el Libro de Buen Amor, La Celestina y El Conde de Lucanor, aunque la primera está escrita en verso, y la segunda, escrita en 1499, es de difícil catalogación: ¿obra dramática o novela dialogada?
A comienzos del XVI, aparece uno de los libros más famosos de caballerías: Amadís de Gaula. También germinan otros géneros novelescos a mediados de este mismo siglo como la primera novela pastoril Los siete libros de Diana, publicada en España hacia 1559 que fue, continuación de la novela sentimental; y la primera novela morisca: Historia del Abencerraje y de la hermosa Jarifa (1551). Estas obras, típicamente españolas, narran las peripecias entre cristianos y moros durante la Reconquista.
Pero el género más importante nacido en España, es el picaresco. Se dice que La vida de Lazarillo de Tormes (1554) es el comienzo de una crítica de los valores dominantes y que contiene características de la novela moderna: narra una vida que va haciéndose contada por el propio personaje.
Y finalmente, llegamos a la obra cumbre de la literatura universal. El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha (1615) está considerada como la primera novela moderna, mezclando realismo y ficción para desmitificar la tradición caballeresca mediante un tratamiento burlesco. Y también como la primera novela polifónica, dando voz a distintos narradores que interpretan la realidad desde distintos puntos de vista.
Hasta el siglo XVIII la novela constituye un género literario desprestigiado en todos los aspectos. Aunque el arte de narrar era conocido desde mucho antes, la novela se conceptuaba como frívola, se la consideraba un peligroso elemento de perturbación pasional y de corrupción de las buenas costumbres, cultivada por espíritus inferiores y apreciada por lectores poco exigentes en materia de cultura literaria.
Comienza a afirmarse un nuevo público (nuevos gustos, nuevas exigencias espirituales) y la novela experimenta una metamorfosis y un desarrollo muy profundo. A partir del siglo XVIII se habla de una tradición novelística, se revestirá de nuevas formas, nuevos contenidos…
Manu, muy buena síntesis, y con información muy valorable, Hay textos que desconozco y los voy a rastrear, Gracias!!
Parece que este artículo ha sido escrito aprisa y corriendo, y hay en él una total confusión de géneros. Amén que decir que el Satiricón es la primera novela gay de la historia me parece que son ganas de llamar la atención. ¿Por qué no lo es la Ilíada? ¿Acaso porque ignoramos de donde proviene el enfado de Aquiles cuando muere Patrocloo? No creo que sea seria hacer tamañas afirmaciones. E insisto: se confunden los géneros: de la narración historica, romana, Ab urbe condita, por ejemplo, nacerá, en la edad media, la épica. Y de está derivara el romance, el romancero, y algunos relatos novelísticos. Por otra parte, y sin ánimo de ser exhaustivo, El conde Lucanor es un libro de cuentos basado en el Panchatantra o el Calila e Dimna, libros de cuentos, exempla, escritos ad usum delphini.
No tengo tiempo para más; pero el artículo habría que matizarlo. Y tal eso exigiera un artículo mucho más extenso o, incluso, un ensayo.
¡Vaya! Cómo no. No hace ni dos días que leia un articulo de Arturo Perez Reverte que clamaba contra el tipico tocapelotas, corrector, histórico y enteradillo, que no puede dormir a gusto si no enmienda la plana a quien sea. Querido señor Vicente Adelantado, a quien no tengo el gusto (gracias a dios) de conocer. Podría hacer usted lo propio que el señor Manu, que tan buenos momentos nos hace pasar con sus articulos, a los que me considero adepto. Podría escribir por el placer de hacerlo y divulgarlo a quienes esperamos cada mes el mismo y dejar de perseguir a los amantes de la escritura con sus comentarios trasnochados. Si no le gustan, cierre la página y listo y si lo que más le gusta es dar clases magistrales de historia, le aconsejo que solicite catedra en Salamanca y deje a cada cual, con sus omisiones o errores.
Todo dicho con el mayor de los respetos, señor mío.
Por cierto me he dejado una coma a propósito, para darle opción a que me saque la piel a tiras. Tambien con todo el respeto.
Muy interesante, Manu, te agradezco que lo hayas compartido.
Lo felicito por tocar el tema, porque es la manera de mantener nuestro espacio, aunque haya gente que clama por el sermon académico. A usted lo va a leer gente bien intencionada, así que déjenos saber más de la novela que es un estado de gracia especial, cada vez más. hasta lo telenovelístico nos está asomando a las grandezas y bajezas, la literature de Amazon echa rayos como Balzac, Joyce, la novela es un género, que pensando en Conrad,y aunque sea un mero thriller, nos muestra en muchos espejos, creo que Kafka es mi verdadero sicoanalista. Hay que leer novelas y hay que votar en política por poetas y novelistas. perdona la mala ortografía, mi laptop escribe en ingles. Qué difícil es poner las tlldes.
FANTÁSTICO MANU. DE MOMENTO ESTOY ESCRIBIENDO
RELATOS CORTOS, PERO NO DESCARTO LA APASIONANTE
META DE ESCRIBIR UN LIBRO.
Gracias por tus envios………y muchos éxitos.
Soy hispanoparlante y concuerdo con que El Quijote es una de las obras cumbre de la literatura universal, pero no es la única, como dice este artículo, porque existe Shakespeare y todo su teatro, y existen joyas hindúes, japonesas…, en fin, dejemos el eurocentrismo, por favor, que confundimos a quien nos lea.
Después de leer todos estos comentarios, recuerdo que los seres humanos reclaman la mediana calidad en todo cuanto consumen aunque estén convencidos de lo contrario, y que la calidad superior los disgusta, no sé por qué. Hace años, en La Habana, asistí a una clase de tai chi para personas enfermas, monitoreada por una señora anciana que olvidaba sin cesar la rutina de los ejercicios y se confundía. Cuando traté de explicar al grupo que estábamos haciendo los ejercicios de manera incorrecta y que eso era peor que no hacerlos, todos se me echaron encima, y la señora fue acariciada como si yo hubiera querido asesinarla. Manu de Ordóñez se ha confundido más de una vez en su artículo sobre los orígenes de la novela, lo que no es un crimen, pero conviene corregir sus errores para que no se reproduzcan en la mente de sus lectores y sigan circulando por ahí como verdades. No hay que ofenderse por eso, ni Manu ni los foristas. Despejar un error es lo correcto. Pero me ha servido para confirmar de dónde sacamos los cubanos ciertas peculiaridades del carácter . De casta le viene al galgo y seguimos siendo muy españoles, aunque a muchos disguste que así sea. Es la verdad. Saludos a todos, jajajajajajajajaj
Quien recuerde como yo haber estado de chica sentada en un bosque en reuniones nocturnas en torno a un fuego con algún experimentado aventurero contando con gusto – y Arte- sus andanzas para embeleso de sus oyentes, sabrá cuál es el origen de la novela realmente.
El «autor» conseguía retroalimentación en la atención y exclamaciones de sus espectadores; los espectadores abrían las puertas a la fantasía y trazaban un canal por donde siempre necesitarían que corrieran aventuras, propias o ajenas.
Me imagino que en las cuevas los hombres primitivos competirían no solo por quién cazaba el mamut más grande sino por quien contaba con encanto – más que con precisión- lo ocurrido para placer y enriquecimiento de todo el grupo.
Estoy de acuerdo con Vicente Adelantado, pero el artículo tiene un valor inmenso: una llamada a la humildad y a la reflexión. Para juzgar el valor de una obra hay que superar los encasillamientos y el primero de ellos es la estricta división en géneros literarios.Enhorabuena una vez más por esta oportunidad para la polémica constructiva.
Siempre me ha interesado la historia, por eso le agradezco que nos haya contado el origen y evolución de la novela, la
cual me apasiona tanto como el género poético. Estaré esperando sus próximos comentarios.
Tal vez hay inexactitudes y muchos puntos quedan abiertos para un debate interesante, pero su artículo cumple cabalmente con el objetivo de un buen ensayo: motivar, despertar interés por llegar a conocer más del tema.
Gracias
Renzo
Todo lo que se diga de la Novela, no es más que dirigirse al mundo de la ficción. Lo importante es que al lector le permite ver castigados a los malos, cosa que, relativamente, muy pocas veces se ve en la realidad. Así, las novelas, por lo general, acaban en aroma de justicia. Las películas dentro de la ficción están en la misma línea justiciera. Es lo que le gusta a la gente, sobre todo ver cómo muere el malo, aunque se sepa que ese va a ser su final.
Saludos Manu
Nada es verdad ni es mentira, depende del… Mira por donde, a mi me ha parecido oportuna la referencia a la primera novela gay de la historia. Me sirve para situarme y no rastrearé para comprobar si fue esa o se escribió otra unos segundos antes. Hablando de segundos, que también son duración… celebro que los artículos tengan esta extensión, aunque para ello sea preciso seleccionar y se queden datos en el tintero.
Excelente comentario.
Estimado Manu:
Como siempre, le felicito por su interesante artículo sobre la novela, entre otros muchos.
En mi humilde opinión, no es malo que haya discrepancias y opiniones varias entre los que formamos parte de este entrañable foro, pues es enriquecedor.
Desde Sevilla, un cordial saludo a todos.
No se si «EL MERCADER DE VENECIA», puede entrar en la lista de maravillosas obras ya mencionadas, esta comedia fue escrita en el siglo XVII, es en verdad una novela bastante divertida, a la vez que pone de manifiesto la absurda forma de pago de Bassanio de un prestamos para poder conquistar a su amada, ha sido llevada al cine y la verdad a parecer con muy buenos actores, es una forma bien creativa de resaltar la avaricia, la falta de inteligencia emocional, y la lealtad hacia un buen amigo, combinándola, con la suspicacia y estrategia femenina, quienes engañan de forma un tanto ingenua al mercader y al resto de los hombres demostrando una vez mas que las mujeres somos mas astutas y habilidosas cuando se trata de conseguir nuestros objetivos utilizando las mismas armas del hombre.William Shakespeare fue y será el escritor de todos los siglos. A veces pienso que en realidad este fue una mujer que tomó y adoptó la figura masculina para poder ser aceptada en una época dominada por el machismo empeñado en usar calzoncillos ajustados y cabellos largos.