El Mataburros. Conducir un programa
Categoría (El Mataburros, General) por Manu de Ordoñana el 07-09-2012
Tags : conducir-un-programa, conductor-de-un-programa, El libro y la lectura, escritor diletante, mataburros, morir-de-pie, presentador-anfitrión, presentador-animador, presentar-un-programa, publicar un libro, ser escritor, vivir-de-rodillas
Conducir un programa de televisión es una expresión que se lee y se escucha con frecuencia en los medios de comunicación, a pesar de que el verbo utilizado no tiene el significado que se quiere manifestar, la de dirigir la transmisión de un programa de radio o de televisión en el que participan personas invitadas. Al parecer, el término proviene del inglés “conductor”, director de una orquesta. De las varias acepciones que da el diccionario de la Academia de la Lengua, la cuarta es la que más se le acerca: “Guiar o dirigir un negocio o la actuación de una colectividad”. Quizá por eso, su uso se podría considerar como válido.
El diccionario María Moliner lo admite literalmente: “Presentar un programa de radio o televisión”. En ese sentido, la palabra correcta debería ser presentador; es la que se ha empleado tradicionalmente en España para designar a la persona que lleva un programa y explica al público cómo es el espectáculo o quién es el artista.
No parece conveniente el uso de director ya que su papel es el de dirigir el programa en su totalidad, siendo responsable de traer a los invitados, preparar el guión, dirigir las cámaras, etc., salvo en los casos en que además de todo eso, el mismo sea el presentador.
Animador también podría servir como la persona que da vivacidad a una reunión y consigue un buen ambiente, aunque esta figura corresponde más al que realiza actividades lúdicas o al artista que canta, baila o ejecuta números de variedades. Tampoco estaría mal anfitrión, por aquello de que participan varios invitados.
Pero ninguna de estas expresiones refleja con exactitud el rol que desempeñan algunos personajes en la televisión, que actúan al mismo tiempo como presentadores, como animadores e incluso hacen de directores, asumiendo el papel de estrella, el que entusiasma al público, la “vedette” del espectáculo. Y como no hay palabra específica en castellano para esa función, tendríamos que inventarla, así que no estaría mal quedarnos con la que ya existe y dar por bueno la de conductor de un programa.
El diario ABC, en su edición del 25 de mayo de 2012, publica una noticia de la agencia EFE sobre la entrevista que Carlos Francino, conductor de la cadena SER, le hizo Rubalcaba: “No tengo el móvil de Rajoy”. El líder de la oposición ha abogado por mantener el diálogo con el presidente del Gobierno para buscar soluciones a la crisis, pero ha reprochado que el jefe del ejecutivo no telefonee al PSOE.
Cristina Tapia en el “Noticias de Gipuzkoa” del dos de marzo de 2011, titula así una entrevista que hace a Pedro García Aguado, terapeuta y conductor del programa de televisión Hermano Mayor: «Comida en la mesa, la cama hecha, ropa limpia… Hay padres que están creando auténticos discapacitados».
Un artículo publicado el 22 de febrero de 2009 en el blog de Televisión Dos ofrece una serie de técnicas para conducir programas, de las cuales se deduce que el conductor debe proyectar su personalidad al programa para hacerlo creíble, de forma que el espectador perciba su carácter ─ a diferencia del actor que representa un papel─, y limita su actividad a programas de corte no dramático, como noticiarios, entrevistas, concursos, charlas, etc. Sí, no está mal, eso podría ser un conductor de programas de televisión.