La autobiografía. Primera parte
No es lo mismo contar la vida por medio de la autobiografía que expresar algo de sí mismo (más o menos real o sincero) a través del diario íntimo, de las memorias…
No es lo mismo contar la vida por medio de la autobiografía que expresar algo de sí mismo (más o menos real o sincero) a través del diario íntimo, de las memorias…
Jane Austin y Maud Montgomery usan temas universales, modos literarios eficaces retórica y estéticamente y saben hacerlos visibles e interesantes para la razón, el sentimiento y la sensibilidad del lector (Inger Enkvist).
Thomas Wolfe publicó tan solo cuatro novelas debido a su muerte prematura a los 38. Aun así, escribió lo suficiente para ser considerado uno de los narradores norteamericanos más relevantes de la primera mitad del siglo XX.
En una autobiografía, el autor reflexiona ante todo sobre su vida interior; en cambio, cuando escribe memorias, se sitúa en el mundo de los acontecimientos externos y busca dejar constancia de los recuerdos más significativos.
Con un estilo sobrio y sin pelos en la lengua, este librito de escasas 119 páginas aborda uno de los temas más de moda en estos momentos. Es una pequeña joya escrita en 1955, quizá una de las pioneras en el tratamiento de esta materia.
Cinco herramientas útiles para todo aquel que quiera iniciar su carrera literaria o simplemente pretenda escribir un cuento, un poema o un relato.
Plasmar en un cuaderno o en un blog las vivencias del mundo emocional, las dolencias o las frustraciones es una buena herramienta que ayuda a gestionar dichos trastornos.
Annie Ernaux no escribe su vida, escribe la vida: sus vergüenzas, sus contradicciones sin tapujos, sin disfraz. Todo ese mundo está recogido en una veintena libros, breves, muy fáciles de leer, llenos de elipsis, donde se narran historias muy condensadas.
En esta entrada encontrarás seis consejos básicos que, aunque supondrán tiempo y energía, no serán especialmente complicados si realmente te gusta escribir.
Es aconsejable escribir un diario pensando en que nadie va a leerlo. De este modo, será más fácil que salga a la luz lo íntimo, lo más personal y así alcanzar la base de todo diario: el diálogo del escritor con su otro “yo”.