Ana Merino y Ane Mayoz

Realismo sucio. Primera parte

El realismo sucio se encuadra, también, dentro de lo que se ha dado en llamar el minimalismo: utilizar los mínimos recursos para contar historias cotidianas, sin añadir apenas figuras retóricas, huyendo de las moralejas y dejando las historias sin cerrar.

Vuelta de tuerca

Un giro inesperado en la trama es una sorpresa que nos plantea si el autor nos está engañando. Este cambio repentino, esta vuelta de tuerca tiene lugar al final del relato, aunque puede aparecer también hacia la mitad.

Realismo mágico. Segunda parte

Si lo fantástico moderno se pone en Europa al servicio por ejemplo de un pensamiento filosófico existencialista, en América lo hace también como identificador de una realidad peculiar, sin descuidar tampoco la denuncia social que siguen manteniendo obras del boom que reflejan la injusticia social, y especialmente con relación al mundo indigenista